El pasado domingo 22 de agosto a través del diario El Mercurio, se dio a conocer una noticia muy significativa para todos/as aquellos que se encuentran vinculados a las Altas Capacidades, puesto que se relata la exitosa experiencia de aceleración curricular de Diego un joven de 19 años que hoy ingresa a estudiar un doctorado.
Al igual que Diego, hay muchos estudiantes en nuestro país que requieren de oportunidades, espacios, personas, para potenciar a un nivel superior sus habilidades y talentos, ya que, si bien Chile adscribe a pactos internacionales que promueven una educación inclusiva, esto no se concretiza en prácticas y políticas que incorporen la atención a las altas capacidades. En este contexto son las familias las que deben buscar respuestas educativas para atender los requerimientos de aprendizaje de sus hijos e hijas con esta condición.
En el caso de Diego, la situación ha sido diferente y con una trayectoria educativa positiva, gracias a la aceleración curricular que se llevó a cabo desde la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso a través de su programa de desarrollo del talento Beta, donde se permitió el ingreso temprano a Diego convirtiéndose en una fuente de oportunidades para su aprendizaje y desarrollo.
En Chile hoy no contamos con normativas legales que permitan este tipo de respuesta educativa, a pesar de que la aceleración es una de las estrategias internacionales efectivas y con mayor evidencia científica en el ámbito de las altas capacidades por su efectividad y bajo costo.
Les invitamos a leer la noticia y a seguir avanzando, desde el espacio que cada uno/a tiene, en construir puentes que ayuden a visibilizar esta temática, con el fin de avanzar hacia una educación inclusiva en donde más niños, niñas y adolescentes, encuentren un espacio efectivo de desarrollo y crecimiento